sábado, 21 de septiembre de 2024

Cómo puede prepararse para ser más feliz y alargar su vida útil

Cuando una persona es feliz y no está estresada por sus pensamientos, se siente saludable y envía mensajes positivos a su cerebro...

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 08/06/2020
3 comentarios
Mujer-feliz
Las personas felices se conocen por la placidez y la fácil sonrisa reflejada en su rostro.

Ser feliz en la vida, cual mágico remedio, garantiza una mayor longevidad y además salud. Totalmente diferente son las personas felices cuando se comparan con aquellas de temperamentos deprimidos, pesimistas y tristes, que siempre todo lo ven a través de un prisma oscuro.

Las causas de estas diferencias son desconocidas científicamente aunque la teoría más aceptada es que el segundo grupo está compuesto por personas sometidas a mucho estrés, causa de sus achaques y de una vida más corta.

LOS QUE MEJOR VIVEN

Quienes disfrutan sus vidas, tanto hombres como mujeres, tienen más años de vida garantizados, según ha sido demostrado por la ciencia en diferentes investigaciones realizadas al respecto, al compararse con quienes sufren, se quejan de todo constantemente y son incapaces de ver nada optimista en la vida que les tocó vivir. Además, los felices se conocen por la placidez y la fácil sonrisa reflejada en su rostro. Son bondadosos e incapaces de desear nada malo para nadie y poseen una elevada satisfacción por sus propias vidas. Perciben internamente la felicidad, independientemente de su vida real. Acumulan muchos años de vida, pero con salud, o tal vez con algún achaque de poca monta.

LOS PODERES MENTALES

Como la mente es poderosa y aún son desconocidas todas sus reales potencialidades, sí es sabido cómo los pensamientos negativos llegan como una señal a los centros nerviosos donde los desequilibran y los lleva segregar cantidades exageradas de diferentes sustancias capaces de acortar la vida y erosionar gravemente la salud.

Cuando una persona es feliz y no está estresada por sus pensamientos, se siente saludable y envía mensajes positivos a su cerebro, que protegen su cuerpo y estimulan la secreción de las llamadas hormonas de la felicidad, como la serotonina u otras sustancias o emanaciones aún desconocidas para la ciencia, que liberan su cuerpo de dañinos mensajeros. Además, por ser felices llevan una vida más sana, fundamentalmente sin adicciones tóxicas y una mayor actividad física.

Los más felices tienen razones para vivir y como están satisfechos de sus vidas se cuidan más que aquellas personas deprimidas y pesimistas.

UN CAMBIO POSIBLE

Los pensamientos pueden cambiarse para bien de uno, pero el primer e inviolable requisito es querer hacerlo y también desear emprender las acciones necesarias en pos de ese positivo fin.

El cambio puede suceder en manos de una persona competente, como puede ser un psicólogo, de quien recibiría una adecuada psicoterapia u otras técnicas con el fin de modificar sus pensamientos y percepciones en relación con su vida y eliminar los pensamientos estresantes.

DESDE LOS PRIMEROS AÑOS ES MEJOR

Siempre es mucho más sencillo enseñar con el ejemplo a un niño en el optimismo y la felicidad, y a que aprenda a ver y aprovechar las múltiples oportunidades ofrecidas generosamente por la vida, y dedicarse desde pequeño a labrar su futuro feliz con una laboriosidad bien orientada hacia el lejano mañana de próspera felicidad. En ninguna época de ningún país del mundo se regala eso; solo se ofrecen ilimitadas oportunidades, siempre bien aprovechadas por los niños y jóvenes optimistas y felices.

Mientras más temprano se empieza, más facilidad para aprender y más se arraigan esos patrones de pensamiento y conducta. Aunque la herencia juega su papel en sí, una persona es optimista o pesimista debido a la principal influencia del medio donde se desarrolla el menor.

Y cuando vemos a nuestro alrededor tantos y tantos longevos en diversas facetas de nuestra sociedad, desarrollando una vida activa y útil, podemos estar seguros de que son personas muy felices de sus vidas aunque tengan que laborar intensamente para lograr esa felicidad interior. Tienen energía, salud, mente clara y bien orientada y fuerza suficiente para ello.


Compartir

Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 3 comentarios


Susana Molina
 10/6/20 9:08

Mi agradecimiento eterno al Dr. Quirantes por su constante preocupación por la salud física y mental de pacientes y lectores; por sus consejos.

 

jorge
 9/6/20 11:25

Sin duda debemos ser fuertes mentalmente pero ahora mas que nunca con todo lo que esta pasando en el mundo. Hay un nuevo método que esta ayudando a muchas de personas activar los poderes ocultos de su mente y mejorar sus vidas. Se los dejo por aqui https://go.hotmart.com/O35458412T?ap=dfe2

 

Reninaldo
 8/6/20 9:12

Que bien viene este artículo para tantas personas negativas en estos tiempos de pandemia donde solo ven problemas donde los optmistas son capaces de ver posibilidades.

Deja tu comentario

Condición de protección de datos