¡Cómo ha llovido en estos días! Tengo muchas cosas por hacer, pero el cielo se desborda cada cinco minutos, y en días así sólo me apetece acurrucarme a leer o hacer el amor con una música suavecita, aprovechando que mi Jorge se relaja cuando cede un poco el irritante calor.
Una vez leí que el verano es una estación de poca práctica sexual en los trópicos (también el invierno, somos muy extremistas). Tal vez lo investigó un hombre velludo, y como tengo uno en casa puedo entender por qué eligió ese problema científico: El mío no suda, se descongela, y en las guaguas lo pasa muy mal porque sus brazos chorrean sobre la gente. ¡Imaginen sus peripecias para dibujar sin destruir el papel!
Por suerte a la hora buena esa humedad no nos molesta ¡todo lo contrario! Tal vez me apunte en la parafilia de los adictos al sudor (sí existe, pero no recuerdo el nombre) o me dedique a la antigua magia de las Hetairas griegas, quienes mezclaban los fluidos corporales para aumentar la energía de los adeptos a su experticia sexual.
Dicen que de la antigua Grecia para acá no se ha inventado nada nuevo, pero yo creo que ellas copiaron de las indias o las japonesas. Lean un fragmentico de un manual moderno de ese estilo de vida: “Toque la boca con el dedo y luego los genitales. Cierre los ojos un momento para visualizar y sentir la mezcla de los dos líquidos. Lleve el dedo a la boca y pruebe el nuevo líquido. Vea y sienta la energía del líquido moviéndose hasta la columna central y expandiéndose hasta la totalidad del cuerpo sutil”.
Hasta ahí es pasable. Luego el consejo continúa: “Los compañeros pueden mezclar lubricación genital, saliva, semen y sangre menstrual en cualquier combinación posible. Toque los genitales de su compañero y los suyos propios para mezclar los líquidos y déselo a probar al compañero…”.
Después de esa cochambre, una llovizna no vendría mal. ¡Mejor ni esperar a después! Ah, si mi guajiro se dejará provocar… (para lo de la lluvia, digo). Por mucho que lo he intentado, no acepta relajitos en el techo o el patio bajo un aguacero, (ni a secas, cabe decir).
Por eso muero de envidia de Across y su historia feliz que terminó en el cuartico de desahogo. Incluso copié lo del pulóver empapado semitransparente, pero este hombre no acepta mezclar nuestros fluidos ¡ni bajo las goteras del Nautilus! Verdad que nuestro patio puede verse desde las casas vecinas y la terraza da para la calle, pero a las dos o las tres de la madrugada ¿a quién le importa si dos tembas se hacen el amor al aire libre, como los gatos?
Le pregunto si de joven no aprovechó algún aguacero sicalíptico y asegura que no, o al menos no lo recuerda, y con la crianza ultraconservadora de sus tías, se lo creo…
Yo sí tengo un par de buenas memorias románticas pasaditas por agua; la primera en el techo del edificio I del ISCAH tras de una fogata que terminó santiguada. (Uf, debo tenerlo en cuenta para la piyamada del 21 y poner a secar madera desde ahora, o no habrá ritual de San Juan para los piyamófilos).
La segunda es de mis ventipocos: Un frente frío decembrino me atrapó en una playa con un delicioso personaje y para que no nos sacaran del agua dijimos que éramos oceanólogos en plena investigación. Aquello no pasó de besos y abrazos, pero la mezcla de sabores dulces y salados me dejó ebria de felicidad y casi me convence de hacer una locura… Suerte que el catarro del día siguiente me dio una perspectiva más realista.
Nunca más tuve oportunidad de compartir un temporal a gusto con una persona que me importara. Mi siguiente gran aguacero acompañada fue en 2013, duró cinco horas y nos atrapó cruzando en bici 16 kilómetros de la Ciénaga de Zapata por un camino plagado de diente de perro y marabú. Mi pareja de entonces se había berreado por cualquier tontería (lo habitual) y no hubo escena XXX bajo la lluvia. Eso sí: Mucho derrape, atravesar grandes charcos a toda velocidad y agua calada hasta el último balín.
Lo único que penetró con ganas esa vez fue una rama espinosa, que provocó seis ponches simultáneos en la rueda delantera de la Bella. No hubo beso Spiderman ni paraguas de Shersburgo, así que aún tengo esa magua pendiente ¡y Jorge no me quiere complacer!
la china
22/8/19 15:35
Les voy hacer honesta con este articulo e vuerto por un momento a sonreir y recordar mis tiempos mozos como se dice en el acto sexual a mi me gusta todas esas locuras y e vivido todos tipos de experiencias en la playa en un parque en una oficina en un matorrar bajo la llubia en el patio de la casa en un carro en un camion en el campo en un hoter en una piscina en un cine donde quiera pero el recuerdo mas lindo que tengo guadado fue en una cascada en tope de collantes y sobre los fluidos corporales los difruto todos eso es normal en el sexo no ballan a pensar mar antes como ahora todo matrimonio qusieran tener su casa pero no es haci cuando yo me case vivia con mi mama y mis hermanos que nos tocaba las posadas o al aire libre y habia jubentud que nada nos importaba pero sinceramente ahora que vivo sola quisiera volver a sentir esos fruidos colporales de antes......................... mis saludos
Jorge
1/7/19 10:13
Gracias por sus comentarios. Solo un pregunta a Alfil: de dónde sacas que no tenemos registrado lo que hacemos? O tu nivel de información es malo o el de tu imaginación es muy alto, pero de veras, puedes responder a mi pregunta? Gracias por tu sugerencia.
Unachik
26/6/19 16:27
Como siempre muy original el articulo, pues yo como dijo Una Dama, cualquier lugar mientras sea seco, jijijij, Lugares "raros" he tenido varios, pero solo voy a mencionar 2, por las consecuencias casi nefastas, de tamañas lacuras , una ves en la asotea de la casa del que era mi novio en ese entonces, creo que tenia unos 22 o 23, y al bajar se me fracturo un pies, y la otra, en un carro, a las 2 de la tarde en una calle para nada intrasintable, que me costo el robo de una mochila, con nada mas y nada menos que mi tesis de pregrado casi lista para imprimir,y a solo un mes para la discución ,creo que esa fue la última locura que hice,sin medir bien donde estaba, ajajajajj
Nor1
26/6/19 13:00
Lo mas "extraño" que he hecho en mi vida sucedió cuando tenia 19 años y en un viaje en tren conocí una muchacha que apenas verla en el anden me llamó la atencion. Aquel cabello afro, con un bello cuerpo tipo Beyonce y un color tambien similar fueron un desafio. Quizas sus ojos rasgados me dijeron al pasar por mi ventanilla "intentalo y tendras un premio". Me atreví, la llamé al lado mio y cambió de asiento con mi compañero de viaje. Todo lo demas fue una mescla de romance, atrevimiento, provocaciones y fluidos. Todo en la oscuridad de un coche de periodo especial bajo una manta, con el fresco de la noche y la luna que tenuamente nos espiaba. Nunca mas supe nada de ella. Tampoco me atreví a buscarla personalmente. Su recuerdo esta ahi, en el placer de una noche, a day in the life...
milo
25/6/19 16:43
creí que había mandado antes un comentario, pero parece que el cel de jorge no estaba de humor, o no les llegó. era para agradecer a Ce por rectificar el nombre de la peli, lo escribí como quiera para luego buscarlo on calma y en medio del congreso de ginecología me entretuve y lo mandé sin editar... como dice mi pepito conciencia: no hay un segundo click para un error de teclado tactil :(
YoelArt
23/6/19 15:36
Siempre es una experiencia tenr esos encuentros a plena naturaleza, entre las inlemencias y el aire libre, adicionandole el factor exotico ... mejor imposible. Quien no a pensado (y ejecutado ) esos encuentros al sonido de la lluvia cayendo? Pero definitivamente nada como la lluvia cayendo en un par de cuerpos en pleno show coital. Por suerte he tenido mas de una apuntada a tal experiencia. Y para el que no se ha atrevido ... (si Gorge, es contigo) ... pues le recomiendo que no se niege al momento. Sea una playa, un parque protegido de oscuridad, una azotea que invita a alvidarse de los calores veraniegos sin necesidad de ventilador, un .... bueno un largo etc. público ... culaquier lugar es perfecto si el deseo y el atrevimiento dan la oportunidad.
AlainD
21/6/19 15:22
Waooo, de solo leer el articulo Milo has hecho que reviva, situaciones de un pasado bien no tan pasado (sigue viviendo situaciones similares a pesar que mis 30 estan en su ocaso), cierto los que opinan que esa idea de ser descubierto aumenta aun mas la virilidad.
A las feminas que esperaban leer algo mucho mas revelador las dejo con los deseos, prefiero guardarme esos recuerdos gratos, mi sugerencia vivan el momento uds mismas (las que no lo han vivido, y las que saben de la experiencia repitanla, y agregenle nuevos detalles), y tomen este articulo de nuestra querida Milo como ese impulso que les falta.
PD: Jorge lo siento, mas claro ni la lluvia.......que diga Ni el agua......... aunque graficastes con mucha imaginación y humor criollo este articulo te toca..... lo siento pero te toca, asi en buen cubano, te aseguro que para la segunda parte del artículo (si es que se escribe) contaria con una caricatura magistral jajajajajajaj..... TE TOCAAAAAA
Carlin77
21/6/19 14:39
Saludo Milo; si he tenido experiencias a la intemperie, pero no bajo la lluvia, ahora me llena de curiosidad y deseo, seguro que cuando pueda lo hago, solo q la pareja que tengo ahora es poco osada en estos temas pero la voy a convencer. Buen tema para reflexionar. Saludo a todos.
AlexeisTM
21/6/19 12:41
Recordar es volver a vivir dice un programa televisivo o decia. No tengo recuerdos de estos temas pero si me ha avivado las ganas de cumlir algunas de mis fantasias. No me gusta ser actor de circo pero el agua de la ducha no tiene el mismo sabor que la de lluvia, por tanto mesclada con algunos fluidos afrodiciacos son mi fantacia a cumplir. Gracias Milo por recordarme una deuda que tengo conmigo mismo.
Anore
21/6/19 11:19
Bueno en mi caso he tenido experiencias variadas, en la playa, en oficinas, nada extraordinario, aunque para mi ya eso es demasiado, soy bastante medida en este aspecto. Si me gustaría experimentar otras escenas bajo la lluvia, bajo las estrellas, etc.... Quien sabe si en un futuro no muy lejano.
Georgesanz
20/6/19 20:46
Hola, guao... todavía no se me va la risa, parece que dos viejas amigas se juntaron y se contagió la perspicacia (me refiero a Lisandra PV), uff Jorge mis respetos, pero porfa... agua a ese dominó, que ya se expresó... si no... como dice Taladrid...
Felicidades por tan gratamente remontarnos al pasado que vale la pena recordar, no detallo experiencias porque sería injusto con quienes leen el subir la temperatura con tanto calor, pero solo aconsejo que se quite un poco el pudor, y se aliente la valentía, a fin de cuentas solo tenemos un chance de vivir, además.. el miedo al infagranti ayuda a la virilidad a mantenerse; dependiendo del lugar, lo vuelve aún + divertido, lo peor que puede pasar... que les lancen un jarro de agua para bajar la calentura, pero fuera de eso... no hay nada que se interponga salvo prejuicios, la única condición ambiental es la oscuridad y a veces... ni eso lo impide, así que, a probar que pase lo que pase, esas experiencias valen la pena.
PlacerFem
20/6/19 16:15
No se que les ha parecido el articulo a los hombres que apenas han comentado. estan ausentes. saludos a todos.
nueva
20/6/19 13:57
preguntenmeeeee, jijiji, pero no voy a contestar porque mi esposo también lee intimidades, fue él quien me habló del sitio
alfil
20/6/19 13:55
¿Bajo la lluvia? ¿En un lugar público? A lo mejor oy muy conservadora, pero no creo que me atreva. Algunas amigas de la oficina dicen que tampoco ellas, excepto una, que lleva rato enloqueciéndonos con anécdotas de ese tipo. Dice que yo no he vido nada aún (yo le doblo la edad) !Qué pais!
PlacerFem
20/6/19 12:56
Estimada Mileyda una vez más Ud. contando esas intmidades que realmente casi nunca se cuentan, yo en mi caso no lo he experimentado bajo la lluvia, pero si bajo el sol ardiente del mediodia, ardiente como nuestros cuerpos, eso nunca se olvida. Felicidades a ud. por hacernos recordar esos momentos de placer y de locura. bracias
Ce
20/6/19 12:49
Los paraguas de Cherburgo (Les parapluies de Cherbourg)
Katia
20/6/19 11:42
Buenos días,no dejas de sorprenderme la forma perspicaz en que escribes, eso me gusta, en esta ecopa del año practico con mucha frecuencia el coito para poneme en forma, ya que es una de las maneras de bajar de peso, los fluidos compartidos son divinos, sin escrupulos alguno ya que se forma tremenda gozadera y los morbos llueven en la piel, cuando tengo la oportunidad de tener sexo bajo la lluvia y en un rio voy sin pensarlo, claro preferentemente en la noche, es ratificante, saludos Mileyda
yania14
20/6/19 10:53
Buenos dias, jaja de experiencias bajo las estrellas y al aire libre muy a lo narural tengo algunas ,desde el dsifrute en la rotonda de punta gorda en cienfuegos en pleno agosto tiempo de carnaval sin importar carro que viniera y las luces encandilaran cuando estamos en plena accion a esa hora no importa nada los sentidos se relajan y que sufran otros nosotros a gozarrrr de lo bueno , hasta bañarse en la playa desnudos con la presencia de un intruso mirando lo que no le toca jajaja pajero escondido detras de las matas y corriendo el riesgo de llevarse la ropa a orillas de la playa , hasta no poder esperar a llegar a casa y aprovechar en escaleras de edificio sin miedo a ser visto,y si es en un carro a lo incomodo donde el calor de pleno verano sofocante te hace sudar al maximo y los cuerpos son una estocada de fluidos de todo tipo donde se desprende nuestro olor y sabor,ufff estas cosas me hacen recordar y ya me da deseos de inventarme una repetida de algunas jajaja, lo mejor de todo es que el riesgo de ser vistos excita tanto que provoca mas deseos, bueno pues nada yo me invento algoo jajaj y feliz jueves a cada asiduo de jueves de intimidades.
Una Dama
20/6/19 10:18
Buenos días para Mileyda, Jorge y todo el que lee estas páginas. Con lo original que está la caricatura de Jorge creo que le van muy bien estos temas de sexo pasado por agua, en mi caso he tenido sexo del bueno en lugares poco comunes: Oficinas, carros y recuerdo en una ocasión que casi nos comen los mosquitos pero a esa hora ni sientes las picadas, cuando aquello no habían tantas enfermedades o al menos no las conocía, pero en el agua o bajo la lluvia ni pensar, prefiero en los lugares secos.
Legna
20/6/19 10:15
Buenos dias, me ha encantado, pues mientras leía iba recordando momentos vividos así...bajo lluvia, sudor y sereno!! Los fluidos corporales los disfruto todos, es algo natural. Hay quien suda excesivamente pero igual se aprovecha, solo cuidando no te caiga en los ojos, ufff, es molesto. Tengo mis memorias, estas que me hacen sonreir mientras escribo... en la azotea de mi casa, bajo una mata de mango y cayendo tremendo palo, de agua??? En el mar con y sin lluvia. jajajaja. Lo importante no es la lluvia, ni el lugar. Se trata del gato (Prefiero los lobos) que te motive bajo la lluvia. Y no digo más...Un saludo a todos, todos. Especial para aquellos y aquellas que tienen un lugarcito en mí. Espero verlos en la piyamada. Besos.
yoel
20/6/19 9:51
jajajajajajajaja, tremendo articulo , reflexionando sobre el sexo y todo lo demas , jajajajaja , realmente es asi , cuando se quiere y existe el deseo de hacer las cosas no hay , barrera ni arquitectonica ni natural que lo evite , como la cancion , caballo viejo ,
caballo viejo de la sabana por que esta viejo y cansao ,por que no se da de cuenta que un corazon amarrao cuando le sueltan las riendas es caballo desbocao y si una potra alasana caballo viejo se encuentra el pecho se le desgarra y no atiende las riendas , jajajajaja , jiijijijji, los que lean esto tengan en cuenta , que mojarse puede probocar neumonia y mas si que dan desprobistops de ropa , jejejeje , gracias por el articulo muy bonito he interesante , jejejejej
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