//

miércoles, 27 de noviembre de 2024

Nuestra salud mental también tenemos que cuidarla

Hay motivos exagerados inútilmente por la mente y capaces de afectar el siquismo de algunas personas como puede ser una separación de pareja o una trifulca laboral…

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 17/02/2020
3 comentarios
Desarrollar el poder de tu mente
Ha sido demostrado que cuando falta la salud mental, puede repercutir sobre la salud del cuerpo.

Vivir una vida saludable, plena y llena de felicidad  no depende sólo de la salud física pues una parte sumamente importante de nuestra existencia la ocupa la salud mental.

Habitualmente se piensa en ella como algo separado de la salud física, pero el cerebro es parte del cuerpo y una perturbación mental por ligera que sea es la causa principal de muchos síntomas físicos. Por ejemplo, quien sufres de insomnio, palpitaciones o desfallecimientos, es posible responsabilizar a la depresión o al estrés como una posible causa.

Ha sido demostrado que cuando falta la  salud mental, puede repercutir sobre  la salud del cuerpo, pero algunos problemas de la salud física de la misma manera pueden aumentar el riesgo de enfermedades mentales como la depresión. Sucede en muchas enfermedades crónicas del cuerpo físico, por lo demás prevenibles en su mayoría, como el cáncer,  la diabetes tipo 2, los accidentes cerebrovasculares, las enfermedades coronarias  y muchas otras más.

EVITANDO AYUDA

Pero determinadas emociones como es la sensación de minusvalía o la vergüenza a reconocerlo impiden compartir las preocupaciones sobre salud mental con familiares allegados o con un médico por parte de la persona afectada. Sin embargo, este asunto de los estados emocionales de la mente debe dejar de ser visto como un tabú, pues de lo contrario, puede traer serias consecuencias para el cuerpo material.

Cuando el problema persiste y se hace incómodo para quien lo padece, interfiriendo hasta con su vida y sus responsabilidades diarias, se debe asistir como primer paso al médico de la familia, donde se hará un primer diagnóstico y una oportuna remisión a un psiquiatra. No importa sufrir de problemas comunes como ansiedad o depresión, o se trate de un caso de más gravedad, como una esquizofrenia, ese médico aguarda por quien sufre y por este camino de la ciencia pudieran resolverse satisfactoriamente estas angustias mentales.

Muchas personas sufren de grados variables de desequilibrios mentales y un  diagnóstico precoz y un tratamiento o un consejo oportuno puede resolver a satisfacción una incomoda situación.

CAUSAS EXAGERADAS

Hay motivos exagerados inútilmente por la mente y capaces de afectar el siquismo de algunas personas como puede ser una separación de pareja o una trifulca laboral. Puestos en perspectiva resultan de situaciones capaces de ser  resueltas con inteligencia o que no pasan de ser un simple mal momento.

Por no buscar ayuda y a pesar de que en la mayoría de los casos el apoyo médico o familiar pueden lograr una remisión completa, muchas personas deciden no hacerlo y se tragan sus  verdades hasta consecuencias imprevisibles con efectos negativos empeorados a nivel social o laboral por ejemplo. Al igual que con la mayoría de las enfermedades físicas, el diagnóstico precoz de un problema mental, real, exagerado o imaginario, conduce a mucho mejores resultados.

LA HERENCIA

El historial de salud de la familia ayuda a calcular el riesgo de enfermedad mental. Algunas pueden ser hereditarias, y deben de incluirse junto a la información ofrecida al médico al, igual que se hace sobre enfermedades del corazón, cáncer y otros problemas de salud.

ANTE LAS PRIMERAS MANIFESTACIONES

Ante los cambios de humor persistentes, el aislamiento, la irritabilidad exagerada, comportamientos extraños e inusuales, insomnio, etc., hay que prestar atención y buscar ayuda profesional tanto por parte de la persona interesada como por los familiares o amigos más cercanos y buenos observadores de estos cambios.

Se podrían evitar muchos casos de depresión severa, violencia contra otros o contra sí mismo, accidentes, adicciones como el alcoholismo y muchas enfermedades físicas, aparejados con un arrepentimiento tardío  y casi siempre ineficaz.

Aunque algunas enfermedades mentales más serias pueden necesitar de tratamientos intensivos a largo plazo y mucho trabajo duro y paciente en las etapas más avanzadas, las personas se pueden recuperar. Y si ponen de su parte y lo hacen, retornan a sus vidas con normalidad.


Compartir

Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 3 comentarios


Brega Con Eso
 13/4/20 10:03

Este artículo está súper interesante y muy completo. Una pena el no haberlo leído antes durante mi investigación para mi podcast Brega Con Eso...un podcast diferente. Son más que bienvenidos a escucharnos y enviarnos cualquier comentario o retroalimentación. Saludos desde Orlando, Florida  EUA

Diana
 19/2/20 7:25

Muy útiles los consejos. Ya los estoyaplicando y me va bien. Nada de negativismos mentales pues solo corroen a quien los tiene.

mirtha
 17/2/20 17:14

Experimento Fallido. Hasta cuando???

Deja tu comentario

Condición de protección de datos