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sábado, 23 de noviembre de 2024

Donde una osa casi mata a Leonardo Dicaprio

Alejandro González Iñárritu nos regala otra gran película: visceral, intensa, técnicamente impecable y poderosa...

Diany Castaños González
en Exclusivo 01/03/2016
4 comentarios

Ya Alejandro González Iñárritu había demostrado su abundante talento para dirigir historias avallasadoras. Ahí están para demostrarlo sus realizaciones anteriores: Amores perros (2000), 21 gramos (2003), Babel (2006) y Birdman (2014).

Con El renacido, Iñárritu y Mark L. Smith adaptan libremente la novela homónima de Michael Punke: En el año 1823, durante la recogida de pieles por parte de una expedición de tramperos en la América salvaje, Hugh Glass (Leonardo DiCaprio), un explorador que viaja junto a su hijo, resulta gravemente herido por el ataque de una osa. Glass es finalmente traicionado y abandonado por un miembro de su equipo, por lo que deberá sobrevivir en un territorio hostil, únicamente motivado por su sed de venganza, en el que existe una guerra entre las tribus de nativos americanos.

La crítica internacional de la cinta la asume como poseedora de una fuerza visual sublime y una fotografía impresionante. Por esto muchos la consideran la mejor candidata para el Oscar a Mejor Película en este año. Y es verdad que la película tiene una entramada visual sorprendente —comparada a la de la cinta soviética Masacre, ven y mira (1985), de Elem Klimov—, pero no es la perfección técnica de una imagen lo que hace la belleza sino su significación potencial como reflejo o símbolo de la emoción que el director pretende capturar.

El renacidotiene tantas ansias de reconocimiento mundial que no solo busca como loca la imagen perfecta, sino que pretende coleccionar unas cuantas por minuto. Así, cada fotograma de la cinta deviene postal con precisión digital loable. Surgen así escenas muy cuidadas, incluso intachables, pero no escenas bellas. No; la belleza es otra cosa. No es algo que se pueda quedar en la epidermis. La gloria no puede tratarse como artesanía ni el arte puede hacerse desde una pseudointelectualidad. Los paisajes de El renacido son tan manipulados y retocados que parecen fotos de calendario.

Lo entiendo. Iñárritu quiere tenerlo todo: Entretener y trascender. Rechazar a Hollywood, porque se cree mejor que sus fatuos premios, pero a la vez ser premiado por su academia. Es como criticar la superficialidad de la fama y en secreto desearla.

Pasando a las actuaciones de la película: Puede ser que la versatilidad de los últimos personajes de Leonardo DiCaprio ameriten pensar que está deseoso de buscar un Oscar, pero sería injusto que lo consiguiera por El renacido. A pesar de su interpretación descarnada, su rol no tenía mucho poderío, apenas la mínima introspección psicológica —algunos críticos han bromeado con el hecho de que la osa que casi le da muerte a su personaje tuvo mejor actuación que él mismo—. Otro asunto es el impresionante desempeño de Tom Hardy, un actor que es capaz de decir con una mirada más que muchos otros con una página de diálogos, y que da vida a Fitzgerald, un personaje traicionero y manipulador.

El renacido es una película visceral, intensa, técnicamente impecable y poderosa, donde el hombre queda expuesto a la naturaleza en su máxima expresión, tanto a su majestuosidad y belleza como a su furia, su peligro y su sentido implacable.


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Diany Castaños González

A aquella muchacha le gustaba acostarse soñando imposibles, hasta que despertó una mañana segura que, durante la noche, había dormido apoyando su cabeza sobre el ombligo de Adán.

Se han publicado 4 comentarios


Hope
 8/3/16 16:42

Por fin !!!!!! encuentro a alguien que comparte mi opinión.

Georgesanz
 3/3/16 13:59

Coincido parcialmente contigo Diana, pero creo que se pudiera haber dado un poco mas detalles y tacto con la relación padre-hijo (tipo flash-back), para que se justificara mejor el desenfreno luego de la búsqueda implacable del asesino.

JM
 1/3/16 14:14

Concuerdo con la autora de este artículo, la actuación de Di Caprio no fue para tanto...para mi este es el Oscar que no le dieron por su interpretación en "The Wolf of Wall Street" del 2013, ya que ese año Matthew McConaughey estuvo inmenso en Dallas Buyers Club.

En cuanto al resto, me pareció un film bastante "regular", pero bueno, no soy experto....también pensé que Mad Max no merecía mucho reconocimiento y ya ve ud...

Marta
 1/3/16 8:16

Excelente comentario, al fin vi una

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