El Barcelona se proclamó campeón de la Copa del Rey de baloncesto tras vencer en la final 64-59 (19-5; 10-13; 17-23; 13-23) al Real Madrid, máximo ganador de esta competición española.
El cuadro azulgrana solo pudo anotar cinco puntos en el parcial inicial ante 19 de sus rivales, pero de a poco fue borrando tal diferencia, aunque llegó con desventaja al ultimo cuarto. Allí sacaron el extra y remontaron un marcador adverso para hacerse con el título por segundo año consecutivo, cuarto en los últimos cinco años.
Fue un partido de mucha defensa y grandes despliegues tácticos, tal y como lo refleja el marcador final. Tanto así, que previo al choque, el Barcelona promediaba 105 puntos por partido, pero la estrategia del entrenador del Madrid, Pablo Laso, esta vez dio resultado, aunque no pudo evitar un nuevo descalabro de los suyos. El conjunto blanco estuvo cerca de cambiar la historia, pero en los minutos finales le tembló el pulso.
Nikola Mirotic mereció el premio al mejor jugador del partido. De los 64 puntos de su equipo, 19 fueron a su cuenta, once de ellos en la épica remontada protagonizada en el tercer cuarto.
Las palmas también para Rokas Jokubaitis, autor de 12 unidades. El jugador lituano fue quien quebró definitivamente la resistencia del Madrid, tras anotar nueve tantos seguidos en el último cuarto para poner al Barca en la senda del triunfo.
Con esta, el Real Madrid suma ahora diez derrotas en los trece partidos ante su eterno rival, sumando partidos de Liga, Euroliga, Supercopa y Copa del Rey.
El torneo celebrado en el Palacio de los Deportes de Granada vio brillar al cubano Jasiel Rivero. En el partido de cuartos de final, el cubano anotó 20 puntos y capturó seis rebotes en 22 minutos sobre la cancha, pero no pudo evitar la sorpresiva derrota de Valencia Basket 86-83 ante UCAM Murcia.
Jasiel Rivero se ha convertido en un jugador crucial tanto en las aspiraciones del club como con la selección nacional. (Tomada del perfil de Facebook de Valencia Basket).
El ala-pívot habanero mereció esa noche el premio al jugador más valioso, tras finalizar con una valoración de 25 créditos. Sin dudas Rivero se ha convertido en un jugador crucial tanto en las aspiraciones del club como con la selección nacional, lo que denota que el antillano está listo para asumir empeños mayores.
Esta semana Cuba disputará en la Ciudad Deportiva de La Habana la segunda ventana mundialista, y allí Jasiel Rivero deberá cargar una vez más con el peso ofensivo del plantel dirigido por Eduardo Moya.
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