El fin de semana dejó cuatro limpiezas e igual cantidad de división de honores. Un bateador llegó a 400 dobletes y otro a mil jits. El líder se mantiene por medio pelo y los estadios siguen confirmando con sus concurrencias que el béisbol no ha muerto en Cuba.
De las barridas, una sonó y aún suena. Los vientos huracanados de Mayabeque se posaron en el Latino y no se fueron hasta dejar sin melena a los Leones, que venían de humillar a unos Leopardos que no encuentran cómo olvidar aquel play off de 2010 cuando el rey de la selva les quitó de las manos, y ante su público, el trofeo.
Llegaron al sábado Industriales y Mayabeque abrazados en el tercer puesto de la tabla de posiciones, y lo más lógico parecía un triunfo para cada uno, pero los muchachos de Michael Rodríguez se negaron a aceptar ese acuerdo. Primero Yadián Martínez aguantó la presión de jugar en el Coloso del Cerro y luego remataron, a pesar de que sus ánimos se exaltaron más de lo debido el domingo, y también supieron reponerse a los rugidos azules en las postrimerías.
El bambinazo de Roberto Acebedo en el noveno inning con el cual se empataron las acciones a ocho carreras parecían el inicio de una épica remontada, en la que mucho tuvo que ver que el alto mando de los Huracanes dejara en segunda a un hombre lento como lo es el cácher Luis Fernández y este fuera puesto out en home con imparable al medio del campo.
Pero en el alargue los visitantes no se amilanaron y pisaron dos veces la goma, una de ellas por el boleto ¡14!; sí, leyó bien, el 14 que concedieron esa tarde los lanzadores de Guillermo Carmona y un novato, Johan Colomina, pegó un cohete con la sangre más fría del mundo ante un bullicio atronador desde las gradas.
Del resto se encargó Marlon Vega, salvador del sábado y ganador del domingo cuando puso fin a la historia con un ponche en tres picheos ante el líder en average del campeonato, Andrés Hernández, quien había sonado tres jits, incluidos dos tubeyes esa tarde.
Este Mayabeque, ya lo he dicho anteriormente, está mostrando lo que ha aprendido de su piloto, un hombre que jugó caliente siempre, estuviera su equipo arriba (las menos de las veces) o abajo (las más).
Sin embargo, la nota individual del segundo juego de esta subserie la protagonizó Yasiel Santoya, quien pegó su jit mil en series nacionales, nada menos que un soberbio batacazo del que le dejamos constancia aquí.
De los 178 hombres que han llegado a esa cantidad de incogibles, solo 19 tienen el privilegio de festejar su entrada en el club con un palazo de vuelta entera, de acuerdo con los datos de Benigno Daquinta, quien acota además que solo tres han completado los dos mil jits con jonrones.
Como Santoya ha vestido varios trajes en las temporadas cubanas, tiene 122 imparables con Sancti Spíritus, su provincia natal; 823 con Matanzas, donde reflotó del silencio halado por Víctor Mesa; 33 con Holguín y ocho con Las Tunas, como refuerzo; y ahora suma 14 con Industriales.
El sábado tocó festejar a otro que le ha dado la vuelta al país buscando el título que le falta: Yordanis Samón, quien consiguió su tubey 400. Es el quinto que llega a esa marca. Ahora el granmense-matancero-industrialista-camagüeyano tiene en la mira par de cifras redondas: está a ocho carreras de las mil y a dos jonrones de los 200.
De la subserie corta de fin de semana, elogios para Matanzas que no se dejó impresionar por los Piratas de La Isla, muy efectivos saqueando naves en sus predios ultramarinos. Liquidaron una presentación por blanqueada, muestra de que son el picheo de mejor efectividad del campeonato (2.44), y la otra por nocaut (exhibiendo igualmente la ofensiva de más alto average del torneo (.323).
Con esos triunfos asumieron las riendas del pelotón, por media unidad sobre los muchachos de Santiago de Cuba, que el domingo pudieron salir del shock en que quedaron el día anterior. A un out de ganar su juego, Alfredo Fadraga empató el partido con un jonrón y luego, jit, base por bola y otro jit se combinaron para que los Tigres los dejaran al campo sensacionalmente.
El mejor taponero de la serie, Luis Fonseca, sumó el octavo punto por juego salvado, y el jovenzuelo de 19 años comienza a acaparar reflectores y elogios de todo tipo.
Los Leopardos de Villa Clara doblegaron par de veces a Artemisa y Las Tunas mejoró su paso al vencer en los dos choques al campeón Granma, que sigue inestable. La situación para Carlos Martí se pondrá más compleja cuando los primos Santos salgan a jugar al extranjero, por lo que necesitan de ganar partidos ahora para no comprometer luego su posible clasificación a la postemporada.
La tabla de posiciones es una muestra de lo previsto: no hay equipos descolgados aún, y los que han tenido mal arranque están cerca de la línea que define los play off. Se prevé, incluso, que con las próximas salidas para cumplir contratos en ligas extranjeras, las tensiones se incrementen por los ocho puestos de privilegio.
Hay más rivalidad que calidad: el picheo general anda por 5.02 de promedio de carreras limpias, se siguen concediendo más boletos (1392) que ponches (1364), mientras el bateo subió a .293 y la defensa se mantiene en .970.
Y este lunes se hizo público que el tunero Rafael Viñales mereció el premio de Jugador Más Valioso de la semana al ganar las votaciones de la prensa y la Comisión Nacional, pero la popular fue dominada por el camagüeyano Juan Sebastián Contreras con cifra récord de 23001 sufragios.
Hoy comienzan nuevas subseries y les dejamos los lanzadores previstos para abrir. Sigan el duelo entre dos históricos: Vegueros de Pinar del Río y Leopardos de Villa Clara, dominado históricamente por estos últimos 86-70; el de los Leones y Cocodrilos de Matanzas, un plato exquisito de las últimas campañas (106-81 por los Azules) y el Granma-Camagüey, que está muy parejito (111-110 por los Toros).
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.