Vladimir Putin resultó reelecto Presidente de la Federación Rusa este 17 de marzo de 2024 con el 87% de los votos. Su nuevo mandato de seis años comienza el 7 de mayo. En esa misma fecha, veinticuatro años atrás, inició su primer término, aunque ya ejercía como jefe de estado interino desde la renuncia de su predecesor, Boris Yeltsin, el 31 de diciembre de 1999, casi 8 años después de la disolución de la Unión Soviética.
Nuestras sinceras felicitaciones por la reelección del Presidente Vladimir Putin.
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) March 17, 2024
Constituye muestra fehaciente del reconocimiento del pueblo ruso a su gestión.
Continuaremos afianzando nexos entre #Cuba y #Rusia, en sectores identificados para el bienestar de nuestros pueblos. pic.twitter.com/UH32EOaX67
El consenso político alrededor del liderazgo de Putin quedó confirmado con un porcentaje más elevado que el 77,53% que obtuvo en el año 2018. El nuevo resultado es interpretado por el ganador como un gesto de confianza por parte de la ciudadanía. Dirigiéndose a quien escogieron otras opciones de la boleta, dijo: "Si la oposición también sintió que debía venir a votar, no importa a quién, pero venir a votar, ya está bien, bien hecho."
Putin salió reelecto en los comicios con más alta participación en la historia moderna de su país: un 77,44% de los ciudadanos rusos con derecho al voto acudieron a las urnas. La Comisión Electoral Central acreditó esa afluencia a la extensión de la votación durante tres jornadas, entre el 15 y el 17 de marzo, similar a la experiencia del referéndum constitucional de 2020, cuando el sufragio se extendió del 25 de junio al 1 de julio de ese año.
La idea de un quinto mandato para el actual jefe de estado ruso fue uno de los motivos detrás de la reforma a la carta magna. La versión entonces vigente impedía una tercera reelección consecutiva: Putin estaba legalmente impedido de optar por otro período en la presidencia, como había ocurrido en 2008, año en que la candidatura del partido gobernante Rusia Unida fue a manos del hasta entonces primer ministro Dmitri Medvédev, quien ocupó el cargo hasta 2012. Durante ese período, Putin hizo un enroque con Medvédev, regresando al premierato que ya había ejercido entre 1998 y 1999.
Con vista al 2024 y tras sugerirse diferentes fórmulas, la propuesta inscrita en la Constitución rusa dejó los límites de mandato, pero con una excepción para el actual titular de la presidencia. El actual mandatario se expresó en contra de los plazos indefinidos en la jefatura del estado, apelando a la experiencia vivida durante la Unión Soviética: "Sería muy alarmante regresar a la situación de mediados de los años 80 cuando los jefes de Estado uno tras otro, hasta el final de sus días pertenecían en el poder."
Rusia se mantiene en el curso político que su liderazgo ha caminado, paso a paso, en los últimos 24 años. Hay una diferencia notable entre los días que transcurrieron bajo la sombra del colapso soviético, si se contrastan con un presente marcado por el pulso geopolítico con lo que en Moscú llaman el Occidente colectivo. Protagonista en un intento de construir un nuevo orden mundial, el país gobernado por Putin no se detiene.
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