Silenciosamente cada mañana más de 200 ómnibus se desplazan por distintos lugares de Cuba. Ellos tienen una misión que para todos nosotros en el sistema del transporte tiene una connotación especial.
Como todos los demás choferes del país, los que lo conducen se enfrentan al desafío diario de garantizar el funcionamiento de esos vehículos, sin las piezas de repuesto que necesitan, sin los recursos mínimos.
Como todos los demás choferes del país, los que lo conducen se enfrentan al desafío diario de garantizar el funcionamiento de esos vehículos, sin las piezas de repuesto que necesitan, sin los recursos mínimos.
Son 254 rutas y 224 escuelas que esperan por ellos. Dentro, se desplazan niños que requieren atenciones especiales, con discapacidades tanto motoras como intelectuales.
La Empresa de Transporte Escolar tiene la sagrada misión de garantizar la movilidad a esos estudiantes, hoy que se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ayer, mañana... siempre. Junto a los maestros de esos estudiantes, sus médicos y tantas otras personas, los choferes que conducen esos vehículos y todos lo que intervienen en que este servicio de transportación, son parte de la epopeya. Que no falte hoy, ayer y mañana…nunca nuestro homenaje y agradecimiento a ellos.
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