Está dejando de ser frecuente leer cómo usar el celular

Conocí en la década de los 70 del siglo pasado a alguien que antes de usar cualquier equipo, leía el manual de instrucciones, y no lo encendía hasta no estudiarse el folleto que daba explicaciones en varios idiomas 

Había que admitir lo acertado de comportamientos como ese, aunque este era un excepcional caso de exageración porque al comprar una lavadora proveniente de la Unión Soviética, impidió usarla casi durante una semana 

Resulta que mientras examinaba detalladamente el folleto, a Manuel se le perdió el manual y entonces al buscar quien le prestara uno, todos le decían que lo habían echado en la basura. 

Sin importar que con sólo una ojeada a la lavadora Aurika era más que suficiente, sólo permitió encenderla cuando consiguió que en la tienda un cliente le diera su manual.

Si algún día encuentro a Manuel, le tendré que preguntar si aún conserva la costumbre, y en caso afirmativo indagaré cómo hace para usar los teléfonos celulares, cuyas opciones no están en un folleto ni tampoco se pueden hallar por intuición. 

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Abundan en las redes sociales y alguna publicaciones digitales, los espacios para informar de herramientas existentes en los móviles, así como un tutorial que indica paso a paso cómo acceder a una funcionalidad. 

Varios lectores dedicados a consultar esas publicaciones se quejan de que en sus equipos no encuentran nada de lo que dicen, y que al hallarlo, tienen otros nombres o la manera de llegar es totalmente diferente. 

Tal situación motiva pensar que son opciones secretas o están diseñadas para que pocos pueden usarlas, y entonces viene la lógica pregunta de para qué le ponen esos servicios a los teléfonos si no facilitan siquiera saber que existen  

Una misma marca de celular, sólo al cambiar de modelo, hace que la configuración sea totalmente distinta, y lo que se hacía de una manera, es de otra, o fue suprimida y no hay nada que se le parezca. 

Lo más elemental son las herramientas colocadas un icono con forma de rueda dentada, pero resulta que lo mismo le llaman Ajustes que Configuración, y puede estar visible o para descubrirlo se necesita primero tocar tres puntitos para llegar hasta él. 

Por tanto, además de no estar las instrucciones detalladas en un manual, si hubiera, al no estar unificada la forma de usarlo, puede ocurrir como a un colega que se le rompió el celular tras cinco años de uso y nunca se había enterado de que el teclado tenía una opción para escribir deslizando el dedo. 

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Cuando coordinaba con Martirena la ilustración de este post, me preguntó dónde y si celular tenía el micrófono y al mostrarle que está en el borde inferior y no a la altura de la boca, con su habitual humor dijo:

Si te enteras de que pusieron alguna herramienta que convierta el pensamiento en voz, avisame rápido.