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lunes, 25 de noviembre de 2024

La otra metrópoli

Washington persiste en la extensión de su injerencismo en África...

Néstor Pedro Nuñez Dorta en Exclusivo 29/01/2013
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Entrenamiento de soldados en el AFRICOM
Entrenamiendo de soldados en el AFRICOM.

De la misma forma que en el siglo diecinueve los Estados Unidos se proclamó “soberano” del hemisferio americano en sustitución de las decadentes metrópolis coloniales europeas, hoy se esfuerza por regentar los destinos de África a desmedro incluso de la añeja influencia en la zona de las capitales del Viejo Continente.

Y las motivaciones, a casi dos siglos, siguen siendo las mismas. La primera potencia capitalista del orbe insiste en reclamar espacios en una loca carrera hacia un controvertido hegemonismo universal.

Desde luego, el botín no es desdeñable.

Hoy, por ejemplo, 25 por ciento de los suministros petroleros norteamericanos provienen de África, especialmente de la rica zona energética del Golfo de Guinea, sobre el Atlántico.

Del continente se obtienen también infinidad de materias primas, oro, diamantes, uranio y nuevos minerales para las industrias de tecnología de punta, amén de los enormes recursos naturales e hídricos que posee. En pocas palabras, una perla demasiado lustrosa como para no pretender poseerla.

Así, en octubre de 2007, luego de ingentes maniobras del entonces secretario de defensa, el ultraconservador Donald Rumsfeld, el gobierno de George W. Bush instituyó el Comando de las Fuerzas Armadas para África, USAFRICOM o AFRICOM, indistintamente.

El acta de presentación del nuevo organismo militar no podía ser más elocuente y explícita: “El Comando África, en concierto con otros organismos del gobierno de los Estados Unidos e internacionales —indicaba el documento- lleva a cabo un compromiso sostenido para la seguridad a través de programas militares, actividades militares patrocinadas, y otras como las operaciones militares dirigidas a promover un ambiente estable y seguro en África en apoyo de la política exterior de los Estados Unidos.”

A partir de entonces, el terreno estaba remodelado para las grandes nuevas aventuras de conquista y control, bajo el ya manido pretexto de evitar la extensión terrorista en aquellos patios, y su conversión en “zonas de influencia” de naciones no aceptables para Washington y sus planes.

Bajo bambalinas, el propio Departamento de Estado explicaba en 2007 que “el objetivo estratégico del AFRICOM es proteger el acceso a los hidrocarburos y otros recursos estratégicos abundantes en África”.

Y con ese presupuesto Washington, por ejemplo, colocó tropas en Uganda en 2011 para, presuntamente, liquidar al titulado Ejército de Resistencia del Señor, operación que le pemitió incursionar además en la República Sudafricana, Sudán del Sur y el Congo. Vale subrayar que ese grupo extremista operaba en suelo ugandés desde hace un cuarto de siglo, y nunca antes despertó el interés “pacificador” norteamericano.

Parte de esa ofensiva regional fue también el derrocamiento del gobierno libio, y ahora el anunciado despliegue, para este 2013, de treinta y cinco comandos militares en igual número de naciones africanas bajo el pretexto de misiones de entrenamiento y para el adiestramiento de personal castrense local.

África además es el escenario de los rejuegos y manipulaciones entre el Pentágono y los grupos extremistas islámicos, aliados estos últimos en no pocas operaciones intervencionistas gringas, y otras veces proyectados como “enemigos a muerte”, según soplen los vientos injerencistas.

Así, por ejemplo, los yihadistas que iniciaron una reciente revuelta en Mali, y que recibieron como respuesta la intervención militar francesa con apoyo del resto de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, OTAN, son los mismos que con el absoluto respaldo norteamericano y occidental depusieron a las autoridades de Trípoli.

¿Cómo para meditar, verdad?


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Néstor Pedro Nuñez Dorta

Periodista

Se han publicado 1 comentarios


Watson
 29/1/13 7:18

Negocio redondo, Estdos Unidos entrena militares que atacan como mercenarios y cuando se portan mal en su país les mandan a la OTAN, ganancias por todas partes... Elemental!!!!!!!!!

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