Inicia venta oficial de divisas a la población

El gobierno cubano comenzará la venta de divisas a la población a partir de este martes, según informó en el programa televisivo Mesa Redonda el vice primer ministro y ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández.  

La decisión se ampara en la recién publicada Resolución 137 , la cual—entre otras cosas—establece que las sucursales bancarias, las Casas de Cambio (CADECA) y otras entidades autorizadas venderán a las personas naturales las monedas extranjeras autorizadas por el Banco Central de Cuba (BCC) y aplicarán el nuevo tipo de cambio oficial en relación al peso cubano y a los márgenes comerciales establecidos por cada entidad.

Marta Sabina Wilson González, ministra presidenta del BCC, explicó en el mencionado espacio de televisión que las operaciones se realizarán en un primer momento solo en efectivo porque CADECA no tiene forma de conectar las transacciones con las cuentas bancarias.

Asimismo, señaló que, por ahora, realizar este proceso mediante tarjetas quedará para una segunda etapa y advirtió sobre la imposibilidad de depositar los dólares que se compren en cuentas bancarias. Una limitación sostenida, dijo, por las restricciones que impone el bloqueo económico, comercial y financiero, el cual limita al país a la hora de depositar esta moneda en cuentas de banco en el exterior para adquirir recursos.

Para desarrollar el traspaso se designaron 37 Casas de Cambio en todo el territorio nacional, ubicadas en su mayoría en las cabeceras provinciales y en los municipios de mayor población. En el caso específico del municipio especial Isla de la Juventud se encargará el Banco Popular de Ahorro.

La titular del BCC apuntó, además, que el tipo de cambio se mantiene en 120 CUP por un dólar y la diferencia entre la compra y la venta se establecerá de acuerdo a los márgenes implementados por los bancos.

“Hay que dejar claro que CADECA hoy, y los bancos en su momento, cuando se incorporen a la actividad, van a vender lo que hayan comprado. Es decir, estamos hablando de un mercado que se tiene que sustentar por él mismo y, por tanto, el acceso a la venta depende de la adquisición que se haya hecho, por ejemplo, el día anterior, de las divisas que hayan comprado los bancos, que son las que podrán vender a la población”, alertó la ministra presidenta.

Wilson González también anunció que en estos primeros momentos solo tendrán acceso a este mercado las personales naturales. Por eso se prohibió la venta de divisas en el aeropuerto y se restringieron las operaciones a un límite de 100 USD o su equivalente en otra moneda.

Se trata, en definitiva, de la consolidación de un proceso iniciado el pasado 4 de agosto, cuando el ministro de Economía y Planificación anunció la compra de divisas por parte del Estado a una tasa diferente a la entonces oficial.

Al respecto, Gil Fernández se mostró satisfecho, al reconocer que los resultados se corresponden con los objetivos propuestos. El mandatario aseguró que, pese a los efectos del bloqueo en las remesas y a la baja entrada de turistas, la compra “es incomparablemente superior con respecto a lo que se comparaba antes de la medida”.

La ministra presidenta del BCC precisó que “durante las últimas semanas se ha comprado 10 veces más divisas que lo que se hubiese comprado en un mes con tipo de cambio de 1 X 24”. Y, según la funcionaria, el euro resulta la moneda que más se ha canjeado en efectivo, seguido del dólar, la libra esterlina y el peso mexicano por ese orden.

En el más reciente periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular se aprobó un paquete de 75 nuevas medidas con el fin de incentivar la economía. Entre las disposiciones sobresalen la flexibilización de la importación no comercial para personas naturales, la captación de divisas que se estaban moviendo en mercados informales y el desarrollo del comercio interior y exterior a través de la inversión extranjera.

Una estrategia audaz que pretende, sobre todo, estimular la producción de bienes y servicios y la circulación de divisas en medio de un contexto complejo, marcado por la persecución financiera de Estados Unidos, el delicado panorama internacional y las problemáticas socioeconómicas internas.

No obstante, sin obviar los riesgos, se busca elevar el nivel de vida de la población. Un objetivo posible siempre y cuando el gobierno vele por garantizar la coherencia y transparencia en cada proceso y cuente con el criterio y apoyo popular.