Nueva patria en Cuba para el rock latinoamericano

Era cuestión de tiempo para que en la escena cubana apareciera un festival de rock que incluyera más que la manera occidental de aproximarse al género.

Tocó el turno de voltearse al sur y entonces apareció Patria Grande, que del 14 al 18 reunió en Pinar del Río, La Habana, Santa Clara y Cienfuegos a bandas cubanas y extranjeras, emergentes y reconocidas, en un ambiente que mucho tiene por dar todavía y que ha descubierto en la identidad de los pueblos originarios y las raíces africanas, una rica fuente de inspiración.

Los cubanos de Tesis de Menta, Tendencia y Zeus, tomaron la escena junto a La Milixia, de Costa Rica; Curva Sur, de Venezuela, y Ra la Culebra, de Colombia; grupos que ya empiezan a destacar y a acumular cada vez más seguidores a lo largo del continente. Los puertorriqueños de Puya, y NoTeVaGustar de Uruguay prestigiaron esta arrancada, que según Kiko, guitarrista de Tendencia, puede dar para mucho más.

La iniciativa es muy buena y han venido conjuntos importantes en el contexto latinoamericano. Creo que puede ser un camino, una manera súper interesante para dar a conocer el rock cubano en la escena internacional, dijo este músico, conocido por cultivar el llamado etno metal junto a su grupo, que este 2014 cumple 20 años de creado.

“He podido estar en algunos eventos en Europa y en otras partes del mundo, y creo que este Festival puede ser una puerta abierta, una oportunidad para captar la atención de las bandas de rock latinoamericano hacia lo que se hace en Cuba, y al mismo tiempo me parece relevante que eventos del mismo abran sus ojos a las agrupaciones cubanas.”

"La concepción de Patria Grande tiene similitudes hacia la forma de pensar del rock latinoamericano, y me parece que para ellos también es una gran oportunidad de hablar e intercambiar con otros músicos y para ellos también es un sueño, una cosa de retroalimentación mutua", aseguró.

“Hay que trabajar en la promoción, se van a poder cosas más grandes y el hecho que  agrupaciones como esta hayan estado interesadas en este tipo de eventos me parece muy relevante. Puya y NTVG crearon pautas para otras agrupaciones  que se van a ver interesadas en venir porque precisamente ya el listón se ha subido, son cosas que prestigian el evento y que sea en nuestro país es una cosa novedosa para ellos.”

 Algo que nos enseñaron los invitados es que no hay límites para la creatividad, y que cuanto más local, más atractiva la propuesta. Solo Andrews, vocalista de Ra La Culebra, advirtió que para ellos son muy importantes los referentes culturales de pueblos indígenas, “por eso hacemos algo que hemos llamado sancocho rock, una mezcla de todo lo que nos hace como somos.”

Utilizamos instrumentos autóctonos, percusión, metales, y letras que defienden nuestro orgullo de pertenecer a esta tierra, explicó a Cubahora.

“Estamos muy felices de poder venir a intercambiar con los hermanos cubanos, para nosotros es muy importante el reconocimiento mutuo, y además, la oportunidad de venir a esta Isla la sentimos como un regalo.”

Mientras, de las dos bandas más conocidas, Puya no necesita presentación entre la comunidad rockera cubana. Portadores de un sonido identificable, lleno de matices como la salsa y el son, y en el que introducen con naturalidad la tumbadora, la trompeta y el saxofón, hicieron vibrar la Tribuna y a los cientos de sus fanáticos confesos que se reunieron en ese espacio del malecón habanero sólo para verlos en vivo, en su primera presentación en territorio nacional.

"Estamos muy felices de estar aquí", gritó a la multitud Harold Hopkins, guitarrista de Puya, "es una realidad muy esperada para nosotros, casi desde que somos adolescentes estamos deseando venir a tocar aquí".

“Compartimos mucho de nuestra idiosincrasia y nos parece fenomenal que el rock sea otro de esos vínculos.”

 Para saber si se repetirá Patria Grande, sólo faltará esperar. Aunque si de disposición se trata ya muchos han dicho que sí, que estarán en la segunda edición.

"Esto es alucinante, tocar acá es un sueño cumplido, ya habíamos venido a tocar en 2009, pero lo hicimos en un lugar más pequeño, fuimos a Holguín y a Cienfuegos, pero esta vez es especial, porque es la Tribuna, un lugar tan mítico, nos resulta difícil de creer", aseguró a la revista Emiliano Brancciari, fundador de NTVG, que arrastra una legión de seguidores por todo el continente y que de seguro aquí ya se cuentan por centenares después de su recorrido de más de una hora por su discografía.

"Si hay una segunda parte, por favor que nos inviten, repetiremos sin duda", insistió.